En las inmediaciones de la autopista con destino a Nuevo Laredo, específicamente en el kilómetro 145+900, las autoridades se enfrentaron a un sombrío hallazgo: el cuerpo sin vida de Jesús Dolores, un conductor de tráiler de 59 años, residente aparentemente de Nuevo Laredo.
El macabro descubrimiento tuvo lugar en la cabina de la unidad de carga, estacionada en las cercanías del municipio de Vallecillo, Nuevo León. Paramédicos de “Bomberos de Rescate” que acudieron al lugar estiman que Dolores habría fallecido aproximadamente siete horas antes de su hallazgo, aunque la hora exacta aún se desconoce.
Las circunstancias que rodean el descubrimiento del cuerpo no han sido esclarecidas, y se carece de información sobre quién fue el responsable de alertar sobre la situación. Lo único que se ha establecido es que Jesús Dolores se encontraba en un tráiler cuya línea no pudo ser identificada, aunque portaba los logotipos característicos.
Ante este escenario, el personal de la Guardia Nacional acordonó la zona para permitir que los especialistas del Instituto de Criminalística y Servicios Periciales de Nuevo León llevaran a cabo las diligencias correspondientes. La incógnita sobre la causa de la muerte apunta, hasta el momento, hacia un posible infarto fulminante, hipótesis que será confirmada o descartada tras la realización de la autopsia correspondiente.