Las Asociaciones Mexicana de Distribuidores Automotores (AMDA) y Mexicana de la Industria Automotriz (AMIA) están intensificando la presión sobre el Gobierno Federal para poner fin al programa de legalización de autos usados en todo el país.
Raúl Quintanilla de la Garza, encargado del módulo del Registro Público Vehicular (Repuve), ha señalado que el argumento principal de estas asociaciones es la escasez de autos que ingresaron antes del 19 de octubre de 2021, lo que, según ellos, justifica el cese de este beneficio. Argumentan que la mayoría de los vehículos en circulación son nuevos o ingresaron después de esa fecha límite.
Estas asociaciones han mantenido una postura constante en contra de la importación de autos usados, alegando que afectan negativamente las ventas de vehículos nuevos. Sin embargo, Quintanilla de la Garza subraya que esta opinión no tiene en cuenta la diversidad de necesidades y posibilidades de los consumidores, ya que algunos tienen la capacidad de comprar autos nuevos mientras que otros no. Considera que los sectores de autos nuevos y usados son distintos y no compiten directamente entre sí.
Para contrarrestar la presión ejercida por AMDA y AMIA, Quintanilla de la Garza enfatiza la importancia de mantener la demanda del programa Repuve, continuando con la legalización de más de 100 autos por día en cada módulo. Argumenta que esto demostrará al gobierno la necesidad continua de este programa para los propietarios de vehículos usados.
El encargado del módulo del Repuve enfatiza la urgencia de que los propietarios de vehículos estadounidenses se acerquen a los módulos para legalizar sus autos, ya que la falta de participación puede poner en riesgo la continuidad de estos programas.