Gracias a la eficiente administración del Gobierno Municipal de Nuevo Laredo, la ciudad ha sido nuevamente la mejor evaluada en Tamaulipas, según los últimos resultados de la Encuesta Nacional de Seguridad Pública (ENSU) realizada por el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI). Este reconocimiento se ha mantenido durante los últimos dos años.
A nivel nacional, Nuevo Laredo ha permanecido en el top 3 de municipios mejor evaluados en nueve ocasiones consecutivas, de acuerdo con el ENSU. Este logro es resultado de los programas y políticas públicas implementadas para mejorar la infraestructura urbana de la ciudad.
La percepción de la población sobre la efectividad del gobierno municipal para resolver las principales problemáticas arrojó un resultado del 59.7%. Le siguen Tampico con el 51.4%, Ciudad Victoria con el 29.0% y Reynosa al final con un 25.3%.
La alcaldesa Carmen Lilia Canturosas Villarreal señaló que este logro es fruto del compromiso y esfuerzo del Gobierno Municipal por atender de manera eficiente las necesidades básicas de la ciudadanía, y afirmó que dicho compromiso continuará durante la presente administración.
“Nuestro trabajo nos coloca como un referente en Tamaulipas, priorizamos el bienestar de los neolaredenses y como resultado, mejoramos la calidad de vida de la población y se ve reflejado en esta encuesta”, destacó la alcaldesa.
Canturosas Villarreal subrayó que la atención constante a las necesidades y preocupaciones de los habitantes ha sido clave para alcanzar y mantener este reconocimiento como el municipio mejor evaluado en Tamaulipas, destacando la importancia de contar con canales de comunicación directa como el Centro Integral de Gestión y Atención (CIGA).
“El gobierno ha trabajado de la mano con la ciudadanía para identificar y resolver las problemáticas más apremiantes. Juntos, seguiremos trabajando para que Nuevo Laredo sea un lugar aún mejor para vivir”, afirmó.
Finalmente, remarcó que los esfuerzos en pavimentación, repavimentación, bacheo y la mejora de los sistemas hidráulicos y pluviales han transformado la ciudad, mejorando la calidad de vida de todos los neolaredenses.